La administración Trump agrega números de seguridad social de inmigrantes a la ‘lista de muerte’ en impulso de deportación

La administración Trump ordenó a la Administración del Seguro Social (SSA) que coloque a más de 6.300 migrantes en su lista para rastrear a las personas muertas, bloqueando su capacidad de trabajar en un movimiento que esperan alentarlos a “autodecortarse”.
La solicitud de la Seguridad Nacional Sec. Kristi Noem para colocar a los migrantes en el “archivo maestro no elegible” mantenido por la SSA impediría que los migrantes reciban beneficios o puedan trabajar en los Estados Unidos.
La medida atacó a aquellos a quienes se les permitió ingresar legalmente al país bajo el presidente Biden y recibieron números de identificación de contribuyentes y autorizaciones laborales, pero que desde entonces han sido revocados su estatus por la administración Trump.
“El presidente Trump prometió deportaciones masivas y al eliminar el incentivo monetario para que los extranjeros ilegales vengan y se queden, los alentaremos a autodesometerse. Está cumpliendo su promesa que hizo al pueblo estadounidense”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Liz Huston, en un comunicado.
La Casa Blanca ha afirmado que a quienes se les ha revocado su estatus y su número de Seguro Social se trasladó a la “lista de muerte” en la lista de vigilancia del terrorista o se descubrió que tenían antecedentes penales a través del FBI.
Es un movimiento que puede funcionar en conflicto con la política de la SSA, ya que el archivo maestro inelegible está reservado para aquellos que la agencia sabe que están muertos.
La SSA no respondió a la solicitud de comentarios, pero según el New York Times, Leland Dudek, comisionado interino de la Administración del Seguro Social, escribió en un correo electrónico al personal que las “vidas financieras” de los que están en la lista serían “terminados”.
Según el Times, entre la lista de terminación hay ocho niños, lo que provocó temores sobre la precisión de la información dada a la SSA.
La medida es la última en una serie de esfuerzos de la administración Trump para aprovechar los datos de otras agencias como parte de su agenda de inmigración.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) firmó un acuerdo con el Servicio de Impuestos Internos a principios de esta semana para compartir las direcciones actuales de los migrantes que han sido ordenados del país en los últimos 90 días.
El Caucus Hispano del Congreso (CHC) criticó el acuerdo, diciendo que el IRS no tiene “autoridad legal” para compartir información de los contribuyentes.
“El Código de Impuestos Internos (IRC) salvaguardar explícitamente la privacidad del contribuyente, independientemente del estado de inmigración. Bajo 26 USC § 6103, las declaraciones de impuestos y la información del contribuyente son estrictamente confidenciales y solo se pueden revelar bajo excepciones limitadas que no incluyen la aplicación de inmigración”, escribió el Caucus en una carta a la HILL.