Meloni, en la industria textil: “Funciona con el 33.9% de su capacidad instalada”

En el diálogo con el Canal E, el empresario textil Marco Meloni dibujó un diagnóstico crudo del sector industrial antes del modelo económico actual: “Estamos en camino a la misma grieta que en 2001”.
Una industria en crisis: caída en ventas, producción y consumo
“La situación es grave: de maldad en peor”, dijo Marco Meloni al describir el panorama de la industria textil. Según el empleador, las políticas actuales apuntan a “un modelo financiero que juega con papel de color” y deja la producción. En una reunión reciente de diez subgrupos industriales, Meloni explicó: “Uno empatado, dos arriba y los otros siete bajos. La caída en los supermercados es la erosión del mercado interno”.
También denunció la falta de dólares y el riesgo inminente: “Ha estado poniendo dólares durante 20 meses. O termina y cerrado, o el que tiene más dice” suficiente, no pongo más “y se retira. En ambos casos, se traduce en despidos, desempleo y baja actividad”.
Tasas impagables y consumo restringido
Meloni cargó contra los aumentos en los servicios esenciales: “Rosearon electricidad, gas, agua, prepago … todo lo que no puede elegir”. Señaló que estos aumentos, en muchos casos entre 100% y 150% en dólares, golpean el medio y el trabajador directamente, lo que debe priorizar los alimentos y dejar de lado el consumo de bienes como la ropa.
“La gente no puede comprar un par de zapatos, ropa o salir a comer una pizza. Por lo tanto, todo está optando, como en 2001, cuando terminamos con una grieta económica y 30 muertos en la Plaza de Mayo”, advirtió.
Capacidad instalada: por debajo del 50%
El uso de la capacidad instalada es otro reflejo del colapso. “El uso promedio fue del 33.9% en el primer trimestre. En mi caso, estoy justo por encima del 40%. No alcanzamos el 50% de lo que produjimos antes”, dijo Meloni.
También explicó la diferencia entre los sectores: “El textil funciona formalmente, con capital intensivo: fábricas con 60 telares y pocos empleados. Por otro lado, la preparación es el trabajo informal e intensivo”. En este contexto, el aumento de las tasas afecta fuertemente: “Un empleado seco usa agua, electricidad, gas y todo aumentó más del 120% en dólares”.
Overcriming total: sin controles ni regulaciones
La apertura de la importación fue otro objetivo de sus críticas: “Los productos importados aumentaron un 150% en el primer trimestre. Eliminan controles como declaraciones juradas o valores de criterios, y las cosas entran en precios ridículos”. Meloni también alertó al riesgo para la salud: “Pueden enviarle un Babero con un formol cancerígeno de Bangladesh y no podremos verificarlo”.
La industria local, dijo, enfrenta una competencia desigual: “Con el contrabando en el NOA y la NEA, y los costos en dólares muy altos, es muy difícil de competir. Mientras que en España el IVA de energía es del 11%, tenemos entre el 27% y el 29%, y el ingreso asqueroso en el textil puede agregar 41% con el VAT”.
“Nos prometieron competitividad, pero nos desmantelaron”
Meloni recordó las promesas antes del actual gobierno: “Nos dijeron que la motosierra llegó primero, luego el excedente, luego la competitividad, y al final, la apertura económica.
El empresario también negó la idea de una industria protegida: “Nos dicen casta, pero apenas ocupamos el 40-45% del textil del país; el resto se importa. En los centros comerciales, el 70% de lo que se vende está afuera. Competimos todos los días”.
Finalmente, Meloni lanzó una advertencia dura: “Dicen que no es lo mismo, pero con este modelo alcanzamos el 25% de desempleo en 2001”.