Croacia está en la primera final del Campeonato Mundial después de 16 años. La edición 2025 será recordada como una experiencia increíble para la generación croata liderada por el entrenador islandés Dagur Sigurdsson. Francia fue derrotada por 31:28 en semifinales ante 15.000 espectadores en el Arena Zagreb.

– No sé qué decir, todavía no puedo creer que estemos en la final. Estoy orgulloso del equipo por cómo luchamos, ignorando el dolor. Dijimos que el último partido para Duvnjak y Karačić fue una motivación extra. Un partido increíble. Quien entró dio el 100%, todos superamos nuestros límites y merecidamente llegamos a la final – dijo el lateral derecho Ivan Martinovic, uno de los héroes del “torneo de oro” para Croacia.

El experimentado Igor Karacic no estaba en los planes de Sigurdsson, pero la lesión de Luka Cindric le dio la oportunidad de ayudar una vez más a su país.

– Cuando salimos del hotel, miles de personas con bengalas nos esperaban en Karlovac. Dijimos que no podíamos perder esto. Contra Eslovenia y Hungría estábamos bajo presión porque teníamos que ganar, pero contra Francia fue como un postre para nosotros: una oportunidad de aprovechar la oportunidad y llegar a la final. La clave fue la defensa 5-1. Una mayor fuerza nos trajo hasta aquí.