Un año después, los diputados de la oposición nuevamente promovieron proyectos para garantizar el financiamiento de las universidades Sociedad El Intransigente

Un año después de la primera marcha de la Universidad Federal en defensa de la educación superior pública, los diputados de la oposición reanudaron los diferentes proyectos que buscan actualizar los artículos recibidos por las casas de estudio y combatir la dentancia promovida por el gobierno nacional.
El 24 de abril de 2024, las autoridades universitarias, maestros, no maestros y estudiantes marcharon en diferentes partes del país para denunciar las medidas de ajuste impuestas por el presidente Javier Milei. A pesar de haber hecho otras dos marchas, los problemas de financiación se mantuvieron y profundizaron debido al rechazo que el presupuesto 2025 recibió en el Congreso, lo que obliga al gobierno a extender nuevamente el presupuesto actual.
Las propuestas
Los diputados Danya Tavela, de Democracy Forever, y Maximiliano Ferraro, de Civic Coalition, presentaron un proyecto de ley que busca garantizar una estabilidad presupuestaria para el sistema universitario. La propuesta tiene las firmas de los miembros de los diferentes bloques de diálogo y establece una recomposición automática de los elementos dirigidos a la operación de las universidades nacionales y los salarios de enseñanza y no enseñanza, basado en la inflación acumulada entre el 1 de mayo y el 31 de diciembre de 2024, además de una fórmula mixta para aumentos en 2025.
El Proyecto TravelA y Ferraro también proporciona una actualización para las becas estudiantiles que utilizan la inflación desde diciembre de 2024 y crean mecanismos de actualización automática para evitar que pierdan el poder adquisitivo. En uno de los puntos también establecen un llamado a la paridad para maestros y no maestros dentro de los cinco días posteriores a la aprobación del proyecto. Para controlar el uso que reciben los nuevos fondos, la auditoría general de la nación (AGN) recibiría la tarea de informar regularmente al Congreso de los centros de estudio superiores.
El proyecto cuenta con el apoyo de los diputados Facundo Manes, Esteban Paulón, Margarita Stolbizer, Marcela Antola, Victoria Borrego, Marcela Campagnoli, Nicolás Massot, Fernando Carabajal, Mariela Coletta, Marcha Coli, Mórica Fein, Mónica, Mónica, Julio Giorgi y Pabloci y Pabloci y Pablo.
El legislador sindical para el país, Pablo Carro, envió el otro proyecto y estableció los mismos objetivos. La actualización del presupuesto de automóvil sería “bimensual y retroactiva al 1 de enero de 2025”; En términos de los maestros y los salarios no de enseñanza, deben reponerse “a partir del 1 de diciembre de 2023 hasta la fecha de sanción de la ley de acuerdo con la inflación acumulada informada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INDED) durante ese período”.
CAR también contempló que la actualización llega a hospitales universitarios, escuelas previas a la universidad y programas de extensión universitaria. La iniciativa de automóvil lleva las firmas de sus compañeros de Bancados Eduardo Valdés, Brenda Vargas Matyi, Hugo Yasky, Mónica Macha, Sergio Palazzo, Sabrina Selva, Ana Carolina Gaillard, Itai Hagman y Jorge Ricardo Herrera.