Una joven pareja afortunada consigue un trabajo cuidando una isla deshabitada en Irlanda
Camille Rosenfeld y James Hayes han conseguido una oportunidad única en la vida. La joven pareja ha sido elegida para ser los cuidadores de uno de los lugares más remotos e impresionantes de Irlanda: la isla Great Blasket.

“Dios mío… parece un sueño hecho realidad”, dijo Rosenfeld al presentador de As It Happens, Nil Köksal.

“Ni siquiera pensarías que sería una posibilidad… Nos sentimos muy afortunados de que nos hayan elegido”.

A partir de abril, la pareja pasará seis meses viviendo en esta isla de 1100 acres frente a la costa oeste de la península de Dingle en el condado de Kerry, Irlanda. Actualmente viven en Tralee, que está a unos 80 kilómetros de distancia por tierra y mar.

La isla está cubierta de un exuberante paisaje verde esmeralda, con colinas ondulantes y acantilados espectaculares, rodeados por olas turquesas.

Salpicada de reliquias y ruinas de un pasado lejano, también está profundamente arraigada en la rica herencia e historia irlandesas.

La isla, que en su día fue el hogar de una comunidad de habla gaélica muy unida, quedó desierta en 1953 cuando sus últimos habitantes fueron llevados al continente para que pudieran acceder a lo que la isla no tenía: servicios de emergencia para la población envejecida e inviernos más suaves.

Desde entonces, se ha dejado prácticamente intacta, lo que ha permitido que la naturaleza recupere la tierra.

Rosenfeld aún no ha puesto un pie en la isla, pero en una caminata reciente por las cercanías, dice que es un espectáculo digno de contemplar.

“Es tan verde, el césped más verde que jamás hayas visto”, dijo.

“Durante algunas semanas en verano, hay unas hermosas flores violetas que florecen por todos los campos. Parece algo del Mago de Oz”.

La isla también está repleta de vida salvaje. Los cuidadores del año pasado dicen que hay tiburones, focas, ovejas, ballenas, delfines y conejos.

El puesto de cuidador fue anunciado por Peter O’Connor y su esposa Alice Hayes, que viven en tierra firme. Pero son dueños de las cinco casas de vacaciones y un pequeño café en Great Blasket, que los nuevos cuidadores supervisarán.